Cuando,paseando por la playa,vemos el atardecer,
creemos ver a Dios,aún cuando no creamos en él.
Si vamos un paso más allá,si nos atrevemos a mirar más allá
de nuestro cielo,descubrimos maravillas como la Galaxia Andrómeda.
Esta espectacular galaxia en forma de espiral,que se encuentra a
unos 2,5 millones de años luz de la Tierra y es el objeto visible
a simple vista más alejado de nuestro planeta.
¿Puede alguien negar ahora que lo divino existe?
Aún más lejos,a 650 millones de años luz de nosotros,
encontramos la impactante visión de un anillo de gases,
en el que el rojo del hidrógeno y el azul del oxígeno
consiguen formar una bellísima imagen.
La Nebulosa de la Hélice,más conocida como el Ojo de Dios,
nació de una estrella moribunda que no quiso desaparecer del todo,
y permanece en medio del infinito recordándonos lo pequeño que somos.
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